Mud Monster
Algunas playas prometen millas de suave arena blanca, otras están cubiertas de piedras y rocas, y luego están aquellas que ofrecen un extra especial: charcas de barro. Son una maravilla natural y una actividad divertida en uno.
Después de todo, ¿por qué conformarse con un simple bronceado cuando puedes llamar la atención y divertirte un poco con un poco de travesura embarrada, como este tipo? Es una forma perfecta de mantenerse fresco y asustar a tus compañeros veraneantes al mismo tiempo.
Horsing Around
De todas las cosas que uno podría esperar ver en la playa, nos gustaría suponer que esta escena no es una de ellas. Haríamos cualquier cosa por averiguar la verdadera historia aquí.
Ya sea una broma que salió mal o una fiesta de disfraces épica que fue abruptamente cancelada, parece que el sheriff local no vio el lado divertido. Las travesuras de este alborotador con pezuñas lo metieron en problemas, y aunque probablemente sea una situación seria, no podemos evitar reírnos.
No Escape
Cualquiera que haya visto Buscando a Nemo sabrá que las gaviotas son retratadas como máquinas de comer codiciosas y unidimensionales. Resulta que Disney tenía toda la razón porque estos maniáticos voladores tienen una sola misión en mente: aterrorizar a la mayor cantidad de veraneantes posible.
Este tipo estaba concentrado en sus propios asuntos, enterrándose en la arena, cuando una manada de gaviotas sigilosas se lanzó sobre él y hizo de las suyas. No hay forma de tener menos suerte que esta.
Sucker for Trouble
El océano es un lugar vasto y misterioso, repleto de criaturas que podrían hacer que a cualquiera se le erice el pelo. La mayoría de nosotros nunca las encontraremos en la vida real, pero este valiente está viviendo lo que muchos considerarían su peor pesadilla: un encuentro inesperado con un sigiloso autoestopista de ocho brazos.
Mientras el resto de nosotros nos preocupamos por las medusas o por pisar algo viscoso, este tipo está lidiando con una situación de pulpo en toda regla. ¡Alguien ayúdalo a quitarse eso de la espalda y devolverlo al océano donde pertenece!
Blending In
Algunas personas tienen un talento natural para atrapar el sol, adquiriendo un impresionante tono bronceado con facilidad. Luego están los perpetuamente pálidos, que pueden pasar horas tomando el sol y apenas desarrollar una pecas.
Un buen ejemplo: este veraneante que está tomando una siesta, tan pálido que prácticamente se camufla con la arena. Solo esperamos que no se olviden de él cuando sea hora de empacar, ¡o se convertirá en un desafortunado tono de langosta para la mañana!
Comfy?
Estar sentado al sol todo el día es suficiente para cansar a cualquiera. Cuando llega la hora de la siesta, puede ser difícil encontrar la posición adecuada—después de todo, la arena no es la superficie más cómoda para dormir.
Estos dos han llevado la relajación en la playa a nuevos niveles, literalmente, con uno actuando como un cojín humano para el otro. No tenemos idea de cómo terminaron en esta posición, y en este punto, tenemos demasiado miedo de preguntar. Aunque tenemos que admitir que parece bastante cómodo—al menos para el que está arriba.
Picture Purr-fect
Los perros son famosos por amar la playa, así que no es inusual ver a un amigo canino chapoteando en el mar o cavando un agujero en la arena. Con los gatos, sin embargo, es otra historia. Generalmente prefieren un lugar acogedor lejos del caos de las olas y las gaviotas.
Cómo este elegante gatito terminó en la orilla o por qué se unió a una sesión de baile sigue siendo un misterio para nosotros, pero nadie puede negar que la imagen resultante es totalmente adorable.
Conclusión
La playa siempre ofrece momentos inesperados y divertidos que nos hacen reír y recordar por qué amamos pasar tiempo bajo el sol. Desde travesuras de amigos y encuentros curiosos hasta las peculiaridades de nuestros adorables compañeros peludos, cada día en la playa trae su propio conjunto de sorpresas. La próxima vez que visites la playa, mantén los ojos abiertos para no perderte las divertidas situaciones que pueden surgir.
Después de todo, las mejores historias a menudo provienen de esos momentos espontáneos que hacen que un día de playa sea verdaderamente memorable. Así que, prepara tu protector solar, un buen libro y no olvides tu sentido del humor; ¡la playa está esperando por ti!
